Deforme como fui siempre, pero ahora en otro sentido. Inconforme como nunca. Todo el tiempo queriendo salir corriendo de donde estoy, y encima me faltan ganas para ir a donde quiero. Que eso tampoco lo tengo claro. No distingo si me falta algo o si algo está sobrando hasta saturarme, lo que necesito no lo busco, lo que encuentro no me alcanza, lo que se aleja me da ganas de llorar.
Es que siempre que no estuve conforme lo solucioné quejándome. Y ahora de quien me voy a quejar? si ya nadie me obliga a estar donde estoy, tampoco estoy tan ocupada como para no poder hacer lo que tengo ganas, y últimamente ni siquiera siento que nadie se queje de mis rarezas, de pero estoy menos conforme que nunca. ¿Entonces estaba mejor cuándo no decidía? ¿Y que pasa si dejo de pensar que voy a hacer y me dejo arrastrar? ¿O es verdad que individualmente no decidimos nunca nada, solo que hasta hace un tiempo en la decisión colectiva me tocó mejor suerte? Hasta se me ocurrió que podía estar así de histérica porque en este momento no estoy esperando nada. Sí, se me ocurre eso, después de un año entero diciendo que por vivir esperando las cosas me había perdido medio año de mi vida. (parece que al final no aprendí nada de la época porcina !), ahora ni espero, ni disfruto. Creo que estuve pensando tanto que ahora me anulé y no puedo pensar en nada. Me siento en blanco. Quiero dormir, no quiero, no tengo sueño, quiero hablar, están todos callados, me hablan, no quiero contestar, estoy hace rato quieta, quiero salir corriendo, me quedo porque estoy cansada. histérica , nada que no pueda superarse con café, comida y la novela, pero tenía ganas de quejarme un ratito de mi misma.
eres mala, muy mala, la reina de la mentira!
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