Días de histeria III

Me poder pedir bastantes cosas. Me podes tirar la escalera y construirme una casa arriba. Me podes poner un baño en el patio. Ok, puedo ceder. Vos sabes, saben los dos que puedo ceder y que cedí bastante. Me pueden tratar de convencer de bajar a comer y de entrar por la otra puerta, de pasar por adentro en vez de por el pasillo. Hasta me pueden comprar, me pueden decir que mirá que lindo quedaría acá un cuadro, dale, porqué no lo querés poner acá, si arriba no lo ve nadie. Y hasta me puedo entusiasmar entonces un poco con esa pared.  Pero No me cortes el agua cuando estoy pintando, No me bloquees el pasillo con un balde de cemento, y No, ni se te ocurra, No pongas una montaña de tierra negra en el medio del patio (de lo que queda de patio.) No. Eso si que no.